El Gobernador de Colima, José Ignacio Peralta Sánchez reconoció que las instalaciones del Centro de Reinserción Social (CERESO) de la ciudad de Colima hacen imposible cumplir con algunos protocolos de seguridad, esto luego de la riña suscitada ayer donde 11 reos resultaron heridos.
Entrevistado al respecto, Peralta Sánchez advirtió que se requerirá de una fuerte inversión para cumplir con los protocolos que se exigen, como inhibir la capacidad de hacer llamadas por telefonía móvil, entre otros; además de cumplir con el proceso de readaptación social.
“Es un centro penitenciario viejo, que tiene deficiencias, que tiene carencias y se requiere hacer muy fuertes inversiones», expresó.
En este sentido, el mandatario colimense dijo que confía en quienes ahí laboran y puntualizó la vigilancia a las prisas de confianza de los custodios.
Refirió que están haciendo investigaciones para determinar qué provocó la riña y actuar en consecuencia.
Cuestionado sobre los reos federales que se encuentran en el CERESO estatal, Ignacio Peralta aceptó que es un tema que sucede a nivel nacional donde muchos centros penitenciarios no cuentan con las garantías de seguridad para cada nivel de peligrosidad.
“Ya lo hemos expuesto, queremos los traslados, se amparan y muchas veces esos amparos impiden que se puedan llevar a cabo los traslados. Para el gobierno del estado es un punto de atención permanente para que no sucedan riñas como la que sucedió, que no tuvo mayores consecuencias, pero que son elementos de indisciplina que no deben de suceder y que tenemos que hacer lo posible por evitarlo”.
Cobro a Mario Anguiano Moreno
Con relación al cobro de 515 millones de pesos que el Congreso autorizó hacer al ex gobernador Mario Anguiano Moreno, Peralta Sánchez expuso que se realizará de manera rigurosa, apegado a la Ley y con absoluto nivel de transparencia.
La expectativa es, señaló, que el cien por ciento de este dinero sea recuperable.





