Por:Pedro Velázquez Campos
“Partido del Birote”
ABSTENCIONISMO AZUL
El fantasma del abstencionismo también recorrió los pasillos del PAN en todas sus sedes del estado el domingo pasado, sólo acudió a votar menos de la mitad de la militancia en Colima, en la que resultó ganador Ricardo Anaya, quien será el nuevo dirigente de Acción Nacional en el país.
En Colima Anaya obtuvo 1 mil 735 votos, por 299 de Javier Corral y 28 anulados;
Lo anterior debe preocupar a los actuales dirigentes del PAN en la entidad, porque no fueron capaces de movilizar a esos «nuevos militantes”, quienes tal parece que requieren de otro tipo de motivaciones para presentarse en las convenciones del blanquiazul.
PAN
La elección del pasado domingo a nivel interno de Acción Nacional entre Javier Corral (16.03% 37,953 y Ricardo Anaya (81.91% 193,944), dio de que; hablar no sólo por el margen ridículo con que ganó el segundo, sino por la dificultad que atraviesa el partido de convocar a panistas ordinarios sin tener que recurrir a prácticas políticas ajenas a sus principios.
El acarreo, la compra de votos e incluso la represión, fueron tema de discusión el día de la elección en estados como Nuevo Leon, DF, Puebla y Chihuahua. En estas entidades se puso en juego el pellejo de algunos funcionarios públicos con aspiraciones para el 2018, pero de igual forma fue muy notorio que la sociedad se involucra cada vez menos en los comicios pese a la retribución económica que reciben de forma ilícita por elegir a cierto candidato.
Medios de comunicación de todo el país aseguraron que el precio de voto por Ricardo Anaya rondaba en unos 200 pesos y que gracias a esto el padrón había logrado un crecimiento inimaginable con nombres y direcciones falsas, lo que al final demeritaría en todos los sentidos la campaña de Corral frente a la maquinaria prianista del «Chico Fantástico” como algunos le llaman al ahora líder del “Partido del Birote”
Probablemente una gran mayoría aplauda la victoria de Anaya, lo que sería una calamidad moral para cualquier persona, ya que el triunfo no favorece a ningún panista real activo ni mucho menos a los jóvenes ansiosos por afiliarse al blanquiazul. Esta elección interna mostró que las filas o liderazgos de Acción Nacional se encuentran infestadas de personajes con ideas y corrientes diferentes a las del partido, lo que demuestra la existencia de un plan estratégico para hundir a uno de los entes más importantes en la lucha por la consolidación democrática a través de sus propias bases.
Fue curioso encontrar comentarios violentos de grupos juveniles a favor de Anaya en redes sociales, puesto que si hoy en día existe una responsabilidad de replantear el adoctrinamiento del PAN es porque está recae en los frentes de Acción Juvenil. Sin embargo, todo indica que el blanquiazul se quedó sin esencia y líderes con calidad moral, quedan temas pendientes para este partido como la guardería ABC, las afiliaciones masivas y el desvío de recursos en el Congreso, por lo que el mandato del nuevo Presidente no será sólo un camino de rosas. Un camino que parece más un territorio plagado de sueños y esperanzas perdidas a punto de terminarse.
“Lo que hoy es noticia, mañana será historia”





