Por: Pedro Velázquez Campos
Pemex
SERVIDORES PUBLICOS
Como su nombre lo indica, el servidor público está precisamente para servir al pueblo, es decir, al servicio de quienes con sus impuestos les paga no solo su salario catorcenal, sino sus jugosas compensaciones, sus vacaciones dos veces por año y sus 60 días de aguinaldo.
El servidor público debe ser una persona que por convicción y por obligación debe de dar su mejor esfuerzo y trabajo para beneficio de la comunidad y de la población a la cual se debe por el simple hecho de prestar sus servicios en el gobierno.
Y el servidor público no solo es el trabajador que atiende en ventanilla de alguna dependencia, o quien recoge la basura y tapa los baches o que repara las líneas de conducción de electricidad, de agua potable o brinda seguridad, sino que los más obligados a seguir este apostolado son los funcionarios públicos, los jefes, los gobernantes.
El servicio público debe ser una carrera de la más alta especialización, ya que un gobernante, un funcionario de primer o segundo nivel, están facultados para tomar decisiones que pueden beneficiar o perjudicar a sus gobernados.
Un servidor público debe estudiar y capacitarse para serlo, ya que en la medida de que obtenga éxito en su gestión, los directamente beneficiados con su trabajo serán los ciudadanos y por ello se debe poner especial atención en los servidores públicos con capacidad de decisión.
Y no solo deberían pasar examen en psicología, toxicológicos, de salud, honradez y cultura, sino que también deberían estudiar y practicar una disciplina que ayuda mucho a desarrollar la capacidad mental.
Es importante mencionar que cuando se toma decisión que impacta a los gobernados si es buena tendrá sus consecuencias pero en múltiples ocasiones una decisión mal tomada nos afecta, nos lesiona, nos lastima y ello lo causa directamente el servidor público, cuyo deber es hacer precisamente todo lo contrario.
Y por ello, quien decidió seguir el camino del servicio público, debería pensar antes que en filias partidistas o intereses de grupo en que su obligación es servir y servir bien a la población a la cual gobierna, pues de otra forma le habrá fallado a todos y a él mismo.
¿SERÁ?
Senadores del PRI y PVEM propusieron crear una nueva Ley Federal de Transparencia que obligará a Petróleos Mexicanos (Pemex) a transparentar las prebendas que entrega al sindicato encabezado por Carlos Romero Deschamps.
De acuerdo con el proyecto, presentado ayer ante la Comisión Permanente del Congreso, la petrolera deberá hacer públicas las donaciones o cualquier aportación que realice a personas físicas o morales, al margen de su naturaleza jurídica o su objeto
Además, tendrá que transparentar el contrato colectivo de trabajo y hasta el reglamento del personal de confianza.
Los tabuladores aprobados, con el desglose de conceptos y montos de las percepciones ordinarias y extraordinarias, se incluyen en el listado de las obligaciones.
Pemex deberá difundir las erogaciones que realice por concepto de jubilaciones y pensiones, así como la actualización del costo actuarial de su cada vez más creciente pasivo laboral.
La propuesta de Ley incluye la obligación de hacer públicos los «apoyos” que se entregan a los trabajadores para el desempeño de su función, adicionales a su remuneración habitual.
En la redacción del Artículo 51, los senadores plantean que también tendrán carácter público los lineamientos aprobados por el Consejo de Administración de Pemex para cubrir los pagos y apoyos a los trabajadores.
Los tabuladores y las contrataciones deberán transparentarse de manera trimestral.
En todos los casos, las obligaciones también aplicarán para la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
“Lo que hoy es noticia, mañana será historia”





