Ciudad de México. «Gobierno, no te metas». Karen, de 39 años, viste de blanco y es una de las miles de personas que participan este sábado en la llamada Marcha Nacional por la Familia. Va cargando un cartelito en el que en una cara se lee la cita anterior y en la otra «Respeto a la educación».

«Lo que pido es que el gobierno respete la libertad de educación que tenemos todas las familias», dice Karen. «Que respete nuestra ideología. La educación sexual me parece correcta, pero que no imponga sus ideologías».

Al mediodía arrancó la marcha. El Auditorio Nacional fue el punto de reunión para esta manifestación encabezada y organizada por el Frente Nacional por la Familia y la Unión Nacional Cristiana por la Familia. Van rumbo al Ángel de la Independencia, en donde se celebra otra manifestación que está a favor de la diversidad de las familias. Y es que según los organizadores de la primera manifestación, esta «no es antihomosexual, sino en contra de que se legalicen los matrimonios igualitarios».

En el auditorio se concentraron miles que van vestidos de blanco como Karen. Son jóvenes, adultos mayores, niños. Están organizados por contingentes, unos vienen del Bajío, otros del norte del país. «Familia unida, jamás será vencida», gritan.

Entre ellos se ven monjas. Llevan carteles y lonas, pero rara es la pancarta que fue hecha a mano. La mayoría son impresas, uniformes.

«Lleve el de la familia, banderines de a diez pesos», dice un vendedor que ofrece cartelitos en los que se lee “Estoy a favor del diseño original”.

El texto va acompañado del dibujo de una pareja de ancianos, mujer y hombre, una de adultos, heterosexual también, un niño, una niña y un bebé.

Los organizadores instalaron grandes pantallas en las afueras del auditorio y en otros puntos del recorrido.

Esperan que participen en esta movilización 150 mil manifestantes.

Paseo de la Reforma está cerrado al tránsito vehicular. Y en algunos postes hay pendones con mensajes a favor de la diversidad y la tolerancia.