Hoy se cumplen 19 años de una de las tragedias más dolorosas en el puerto

Volví a nacer, la vida me dio otra oportunidad

Manzanillo (EDGAR CAZARES  para VADENUEZ).-  Pese a los 19 años de distancia, Francisca Zúñiga Quintero, sigue recordando el 9 de octubre como si hubiera sucedido ayer. No es para menos. Perdió a cuando menos 6 seres cercanos en su oficina en aquella trágica mañana incluida una hermana. Esas instalaciones, ubicadas en la desaparecida plaza Santiago, ya habían dado aviso del riesgo aunque nadie escuchó la sugerencia. Fue simplemente como una bomba de tiempo que aquella sacudida, de aquel lejano lunes, detonó con un saldo mortal para nuestro municipio.

Con lágrimas en los ojos Francisca Zúñiga Quintero nos relata que llevaba ya poco más de cinco años trabajando en una dependencia oficial y en algún momento, a finales de 1994, les avisaron que sus instalaciones se ubicarían en el complejo denominado Plaza Santiago, en el acceso a la comunidad del mismo nombre. En un principio vieron bien el cambio debido a que esta zona era prácticamente turística. No obstante el paso de los días les dio noción del riesgo que se avecinaba “la oficina se movía mucho incluso cuando circulaba cerca un camión pesado”, narró.

Al respecto la entrevistada recuerda que algunos de sus compañeros, alrededor de 8 en aquella mañana, se disponían a desayunar y algunos de ellos fueron a comprar pan. Al regreso, casi a las 9 de la mañana, comenzó la pesadilla “solo sentí que el piso de movió, primero poco, luego ya muy fuerte”, contó. Asimismo dijo que en cuestión de segundos vio como la mayor parte de sus colegas atinaron a escapar, a salir de la oficina, “pero a mi me venció el miedo, me quedé un rato sentada, como en shock, traté de caminar pero solo llegue a la puerta”, abundó. Ese detalle le salvó la vida.

Y es que en aquellas instalaciones es murieron al menos seis personas adscritas a la procuraduría de justicia. Otro par de más perdió la existencia en unas oficinas contiguas particulares. Zúñiga Quintero narra que, trabajando en un segundo piso, ya no pudo salir de ahí y espero la ayuda que llegó casi 20 minutos después “cuando salí me comencé a dar cuenta de la magnitud del desastre, vi cuerpos, escuchaba gente quejándose, partes cercenadas”, añadió. Entre ellas yacía el cuerpo de su hermana, Norma Lourdes Herrera Quintero, aún con vida pero agonizante “luego la llevamos al IMSS pero horas después murió.

“Yo estoy conciente de que recibí una segunda oportunidad… quién lo fuera a decir, el hecho de asustarme, de entra en pánico, me parelizó y eso me salvó la vida, los que corrieron o les cayó encima las escaleras que llevana a la primera plata, algunas marquesinas, fue algo espantoso, yo vi moriri ahí a mi hermana… no hay día en que yo no recuerde aquella tragedia, lle llevó meses recuperarme, gracias a terapia, tardé como dos semanas en salir en casa y hoy recuerdo tristemente aquello, nunca imaginé perder tanto en tan poco tiempo”, matizó la charla.

Cabe destacar que el saldo del sismo de 1995 –de acuerdo a cifras oficiales- tan sólo en Manzanillo asciende a poco menps de un centenar de fallecidos y desaparecidos, resultando las tragedias de la Plaza Santiago –donde hoy se ubican los terrenos del Tinaguis homónimo- y del Costa real las más letales en aquella fecha. Además también se cuentan los daños irreversibles a la antigua central camionera, al edificio federal de la avenida Morelos, entre otros.