Lo que hace unos días fue una noticia de tristeza e indignación, hoy se convierte en un motivo de esperanza para la comunidad católica de Colima.
El Santuario San Juan Pablo II, diócesis de Colima, informó mediante un comunicado oficial que los ladrones que habían sustraído objetos sagrados regresaron absolutamente todo lo robado.

De acuerdo con el documento, durante la madrugada de este 11 de diciembre fue localizada en la entrada del templo una mochila que contenía los dos cálices y el evangeliario que habían sido llevados durante el robo. Todo indica que, al momento del atraco, los responsables se llevaron la caja fuerte sin saber qué guardaba y, al descubrir que se trataba de piezas sagradas y no de objetos de valor comercial, decidieron devolverlas.

En el comunicado, el Santuario califica este hecho como “una gran bendición, un regalo del cielo” en estos días previos a las celebraciones guadalupanas. En medio de la violencia e inseguridad que golpean al estado y al país, señalan que este gesto recuerda que aún puede “brotar un rayo de luz” incluso en quienes se equivocan.

La comunidad del Santuario también subraya que el regreso de los objetos no borra el daño causado, pero invita a mirar el hecho con ojos de fe y a no olvidar que “ningún corazón está tan lejos que no pueda ser tocado por la misericordia”. Asimismo, agradecen las oraciones realizadas en estos días y llaman a seguir pidiendo por la paz, por la conversión de quienes cometieron este acto y por las familias que diariamente sufren situaciones de violencia.

El comunicado concluye pidiendo la intercesión de Santa María de Guadalupe, Madre de la esperanza, para que siga cubriendo a Colima con su manto y enseñe a confiar en la fuerza del bien.

En Noticias Va de Nuez dimos cuenta del robo; hoy compartimos también este desenlace que llena de alivio y esperanza a la comunidad.

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