El Gobernador de Colima, José Ignacio Peralta Sánchez expresó que el cien por ciento de los adeudos que la actual administración ostenta con el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) fueron heredados por la administración anterior, en donde la cantidad asciende a 320 millones de pesos.

Lo anterior, luego de hacerse público que el mencionado Instituto “está en quiebra financiera por los abusos y corrupción de sus ex directivos”, según Pedro Zenteno, director de normatividad de administración y finanzas.

“Nosotros desde el primer momento reconocimos el pasivo, no hay una negativa a pagar, entendemos y tratamos de hacer entender que la situación financiera es compleja, y, no obstante de ello, hay un pasivo que reconocemos y que estamos haciendo un esfuerzo para pagar”, mencionó el Gobernador, al citar que la Ley de Ingresos ha generado condiciones para que sea viable pagar los mencionados pasivos.

Explicó que, tras una serie de diálogos con el Director General del ISSSTE a nivel nacional, Luis Antonio Ramírez, hay avances significativos. “Aquí en esta administración el ISSSTE sí nos escuchó y nos está generando una posibilidad que es financieramente viable, ya el acuerdo está aceptado por el Gobierno del Estado y está en vías de ser aprobado por el Consejo del ISSSTE”.

Peralta Sánchez reiteró que existe incertidumbre sobre la descentralización del Instituto, asegurando que el tema no ha ido más allá de reuniones.