La intención es cerrar las compuestas de acceso de agua que tiene la termoeléctrica para que no se contamine más la laguna

Norma Moreno González

Luego de conocer que la PROFEPA dictamino que la termoeléctrica no causo daño sobre la laguna de Cuyutlán, los pescadores ha comenzado a construir un muro de costales llenos de arena, para detener futuros derrames de combustóleo a sus granjas de cultivos y áreas de captura.

Señaló María del Carmen Velasco Chávez, presidenta de las sociedades pesqueras de la laguna de Cuyutlán, quien detalló que la intención es cerrar las compuestas de acceso de agua que tiene la termoeléctrica para que no se contamine más la laguna y así, proteger su fuente de trabajo, porque no es posible que la Profepa no determinar ningún daño en el vaso lagunar.

Es ilógico ese dictamen expresó, cuando hasta el propio gobernador del Estado José Ignacio Peralta Sánchez, visito la zona dañada y constato que efectivamente había afectaciones en la laguna de cuyutlán.

Mencionó que no existe un número preciso de cuentos costales de arena van a colocar, porque entre los pescadores acordaron poner cada uno entre 10 y 20 sacos, dejando en claro que la finalidad es evitar que la termoeléctrica no continúe contaminando la laguna y lo más lamentable es que no quiere hacerse cargo de los daños que ocasiona.

Lamentó que exista mucha corrupción y las dependencias pierdan su credibilidad, porque en este caso hay pruebas, fotos y videos de las afectaciones, que desafortunadamente determinaron que no había daños en el área, además como dicen los pescadores hasta el momento nadie, ni los propios manzanillenses se han beneficiado de la termoeléctrica.