Concluyen en Oaxaca penal para reos del fuero común

_penal_interior

El Centro de Readaptación Social (Cereso) número uno, recién concluido en la comunidad de San Francisco Tanivet, en el municipio de Tlacolula de Matamoros, cumple con los protocolos de la infraestructura penitenciaria y la tecnología  utilizada a nivel nacional, pero también de rehabilitación, porque los internos estarán separados entre los reos procesados y los sentenciados, así como por sus áreas de esparcimiento deportivo, de educación y de trabajo.

El secretario de Seguridad Pública, Alberto Ruiz Martínezresaltó que “Oaxaca estará a la vanguardia del sistema penitenciario”.

Este Cereso, de mediana seguridad, quedó concluido a final del mes julio, y costó unos mil 900 millones de pesos, por sus características, es similar al Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso), número 13, de Mengolí de Morelos, de Miahuatlán de Porfirio Díaz, en la Sierra Sur.

El reclusorio tiene 12 pabellones con una capacidad para albergar a dos mil 500 internos, todos del fuero común.

Pero, anotó, estarán separados entre procesados y sentenciados, así como por el tipo de delito.

La Secretaría de las Infraestructuras y Desarrollo Territorial Sustentable (Sinfra) se encargó de revisar el proceso constructivo que arrancó en 2012.

La recepción de la obra, por sus características, nos llevará casi más de un mes, a la vez se revisa el sistema electrónicos y electrónicos, así como el sistema de redes de computo”, detalló Ruiz Martínez.

Después vendrá la etapa de “estrezamiento” del inmueble que consiste en empezar a utilizarlo “en el día a día”, antes de la conclusión de año será la ocupación de sus áreas. El procedimiento se prevé se realizará de manera paulatina

En un primer momento, ocuparán este inmueble, los internos de cuatro cárceles locales, calificadas como sobrepobladas; esto será antes de concluir  2015, estimó.

Explicó que esta separación de internos entre procesados y sentenciados está dispuesta por la normativa federal y por los estándares del sistema penitenciario nacional e internacional.

La situación jurídica y su peligrosidad, los separará”, destacó.

Precisó que los pabellones contarán con 24 celdas, cada una con capacidad para cinco internos a fin de cumplir también con las disposiciones legales y así evitar el hacinamiento.

Además, destacó que en todos los pabellones, habrá una celda especial para discapacitados con rampas y demás instalaciones.

Subrayó que la reinserción social de los internos está garantizada porque se brindará educación, deporte, salud y trabajo en espacios dignos y construidos específicamente para esas actividades.

Este es el principal objetivo; queremos que los internos cuando salgan libres se reintegren a la sociedad y no vuelvan a incurrir en delitos”, aseguró.

Resaltó que la construcción del Cereso permitirá el cierre de la Penitenciaría Central de Santa María Ixcotel, así como de los penales de Huajuapan de León, Tlaxiaco y Santa Catarina Juquila, donde se presenta sobrepoblación.

También, subrayó que en los sistemas de seguridad de la aduana y de los demás edificios se aplicará tecnología de punta.

(En el acceso) se utilizarán cámaras de vigilancia y sistema de rayos infrarrojo para detectar vehículos con reporte de robo o vinculado a algún acto delictivo, así como alcohol, sustancias prohibidas y armas de fuego. También, habrá detectores de cavidades para evitar el paso de sustancias por vía vaginal, acabando así con las revisiones arcaicas”, indicó.

Destacó que el Cereso número uno está doiseñado a prueba de fugas, no solamente por la tecnología de punta utilizada, sino también debido al grosor de sus bardas y paredes, así como por su cimentación.

Mencionó que la seguridad penitenciaria la brindarán unos500 elementos debidamente capacitados y con examen aprobado de control de confianza, para así dar la debida atención a los visitantes y el manejo de internos de acuerdo a protocolos.

Aparte de esto, refirió que el Cereso número uno contará con un área canina para recorridos de vigilancia, inhibidor de llamadas telefónicas de celular y mobiliario en las celdas conforme a los estándares internacionales.

(Este tipo de muebles) cumplen con las medidas de seguridad; los internos no se pueden hacer daño porque las literas, la taza de baño, el lavabo y la regadera no se pueden desmontar ni tienen manijas”, indicó.

INVERSIÓN MILLONARIA

  • El Cereso número uno inició en agosto del año 2012, se construyó con una inversión de mil 900 millones de pesos.
  • La obra comenzó por la cimentación de la barda perimetral y las 10 torres de vigilancia, así como del acceso o aduana, el área de gobierno y de la zona interna, donde estarán los 12 pabellones y las demás instalaciones en una extensión total de 60 mil metros cuadrados.
  • La barda perimetral o muralla, fue  construida con concreto reforzado con 15 centímetros de ancho a una altura de seis metros, para evitar cualquier intento de fuga.
  • El penal estará resguardado por nueve torres de vigilancia, más una central, donde se podrán observar todas las instalaciones.
  • Contará con un pozo propio para abastecer de agua a toda la población, después de ser filtrada y potabilizada en una cisterna especial.
  • También tendrá una planta de tratamiento de aguas residuales que serán utilizadas posteriormente para los servicios sanitarios.
  • De igual manera, contará con pozos de absorción para infiltrar el agua de lluvia y recargar los mantos acuíferos.

LA VIDA TRAS LAS REJAS

  • 12 pabellones
  • 2 mil 500 internos del fuero común
  • 24 celdas por pabellón
  • 5 internos por celda

OBRA PENITENCIARIA MODELO

Es el primer centro penitenciario estatal de mediana seguridad con la mejor construcción y tecnología en el país. Es similar a los centros federales de readaptación social de Hermosillo, Guanajuato y de Miahuatlán de Porfirio Díaz. Es modelo a nivel nacional, dicen autoridades

POBLACIÓN PENITENCIARIA EN OAXACA

El hacinamiento es uno de los tantos señalamientos que la CNDH ha realizado al sistema penitenciario oaxaqueño

  • 4 mil 635 total
  • 821 fuero federal
  • 3 mil 814 fuero común

Fuente: Inegi

EXCELSIOR