Columna | Punto (.) Rojo

  • Virgilio… Manzanillo… La Caja de Pandora del Seis de Junio.

J. BALDOMERO DÍAZ GAYTÁN

Virgilio Mendoza ha tomado la decisión más inteligente de lo que va de su carrera política: No se bajara de la contienda por la gubernatura del estado. Y no lo hará por dos razones fundamentales: Primero, porque los números de las encuestas no coinciden con el humor social que se respira en las calles, en los barrios y en las colonias. Y segundo, porque sabe, entiende que va a ganar la elección en Manzanillo, el municipio más grande, el más poblado, el que da más votos. La pregunta llega, pues, en automático, obligada, ¿por cuánto ganará en Manzanillo? Si logra obtener 50 mil votos, entonces sí puede ser gobernador, sí puede ganar la elección.
Virgilio sabe que nunca como antes en Manzanillo se le había presentado una circunstancia tan favorable, por eso, su slogan va dirigido a los 144 mil votantes del puerto, esa frase de «Ya nos toca» ha despertado un interesante movimiento regional. Hay que decirlo como es, «como va» dicen los jóvenes: La historia moderna, la de los últimos 50 años nos dice que Manzanillo ha sido querido por candidatos, pero despreciado por los gobernantes. Virgilio y sus seguidores saben que si Manzanillo despierta el seis de junio con ganas de tener un gobernador, entonces la fantástica cifra de los 50 mil votos estará al alcance de la mano. Y es que, la realidad la reconocen todos: Manzanillo tiene la energía y los votos que se necesitan para poner gobernador.
¿Virgilio Mendoza va a ganar la elección por la gubernatura en Manzanillo? Creo que sí, se está formando una ola social en favor del único candidato a gobernador originario de Manzanillo. Y tiene muchas posibilidades de ganar en Armería, el quinto municipio más poblado del estado y puede ganar en Minatitlán, la tierra de los hermanos Mancilla, hoy aliados del proyecto de Virgilio. Si gana en el triángulo Manzanillo – Armería – Minatitlán, entonces en automático, por lógica, por sentido común, el proyecto Verde estará en la pelea por ganar el domingo seis de junio.
Pero no es todo: En Villa de Álvarez, el alcalde más popular de los últimos 30 años, Felipe Cruz, es parte de la oferta política de Virgilio Mendoza. Y en Cuauhtémoc, las huestes de Rafael Mendoza, que ha gobernado el municipio los últimos seis años, también van con Virgilio. Y en Colima, capital, José Manuel Romero y Roberto Chapula, dos políticos de alto calibre, son candidatos y operadores del proyecto que oferta el Partido Verde Ecologista.
Es cuestión de números, cuestión de lecturas, cuestión de comprensión del humor social. Parece que la popularidad de Virgilio está en las calles, no en las encuestas. Y algo clave para comprender lo que viene: Parece que en este 2021, Virgilio no lleva lastres como aliados en su propuesta electoral. Y es que hay que ser claros en la conclusión: En el 2018 la marca PRI fue la que hizo perder a Virgilio. Pero bueno, como siempre tenemos que insistir en la tesis de que eso, sólo parece.

Y ni una línea más.