Anthony Milewski, administrador de fondos de Pala Investments Ltd., cree que uno de los mejores retornos derivados de un auge global de los vehículos eléctricos será un metal duro y gris que hasta el momento ha concitado escaso interés de los inversionistas. Esa es la razón por la que lo está acumulando.
Durante el año pasado, el fondo minero con sede en Suiza estuvo comprando cobalto, un elemento esencial en las baterías de iones de litio que alimentan los autos de Tesla Motors Inc. así como todo tipo de dispositivos móviles. Incluso después de que el año pasado los precios subieran 50%, Milewski y otros que tienen una posición alcista esperan más avances a medida que empresas como General Motors Co. y Volkswagen AG fabrican sus propios vehículos electrónicos.
Pero invertir en cobalto no es tan simple. Hay muy pocas negociaciones de contratos a futuro en la Bolsa de Metales de Londres, lo que podría significar mayor riesgo de volatilidad. Un puñado de empresas de baja capitalización y acciones de bajo valor (penny stocks), como Fortune Minerals Ltd., están desarrollando proyectos de cobalto, aunque la mayoría no comenzará a producir en años. Y para los gigantes mineros como Glencore Plc y Vale SA, el metal sigue siendo solo un pequeño subproducto de las grandes operaciones de cobre y níquel.
«Al comprar la existencia física, usted realmente es propietario del metal que va en las baterías», dijo Milewski, director gerente de Pala, durante una entrevista telefónica desde Zug, Suiza. «Es una opción mucho más atractiva y no somos el único fondo haciendo esto». El ejecutivo declinó comentar cuánto ha acumulado.
El atractivo del cobalto para los fabricantes de baterías de última generación es que el metal es un electrodo eficiente y puede ayudar a que la energía almacenada dure más. Aunque por años hubo una sobreoferta en el mercado después de la crisis financiera, la oferta se está ajustando porque el auge de vehículos eléctricos debiera aumentar la demanda en promedio 16% anual hasta 2022, según la investigadora de bienes básicos CRU Group.
Ello ya está afectando los precios físicos, que se sitúan en los niveles los más altos en más de cinco años. El viernes, el cobalto de bajo grado alcanzó un máximo de 16.50 dólares la libra en el mercado a la vista, un incremento superior al 80% en relación a los mínimos de diciembre de 2015, según Metal Bulletin Ltd., una firma con sede en Londres que sigue los precios del mercado de bienes básicos. Este año, los precios promedio podrían exceder los 18 dólares, el rango superior de las proyecciones que hizo CRU en noviembre, y podrían situarse «muy por sobre» los 20 dólares si la oferta es inferior a las estimaciones, dijo Edward Spencer, consultor sénior de CRU, en un correo electrónico.
También existe el riesgo de que los altos precios del cobalto motiven a los fabricantes de baterías a generar mejores diseños que usen menos cantidad del material.
Pero Milewski no está preocupado. «Hasta el momento, las ventas de vehículos eléctricos han superado las proyecciones de manera espectacular,» dijo Milewski. «No veo la razón para que ello no continúe».
