América tendrá su revancha en el Mundial de Clubes de Japón, después de lograr su boleto en la final de la Liga de Campeones de la Concacaf, al ganar 2-1 en el juego de vuelta para superar en el global 4-1 a los Tigres, que murió de nada en el Estadio Azteca.

Los goles americanistas fueron obra de Michael Arroyo, 67 y Osvaldo Martínez, 86, mientras que el francés André-Pierre Gignac había puesto adelante a los Tigres, al 39.

Luego de quedar en quinto lugar en la pasada edición del certamen, los jugadores, directiva y cuerpo técnico se habían quedado con la espinita clavada, por lo que estaban ilusionados de volver a regresar al país del Lejano Oriente.

Al América le bastó el 2-0 que logró en el Universitario para liquidar en casa, y así lo hizo.

Con ello Ignacio Ambriz alcanzó su primer título en el banquillo de las Águilas y ahora con más razón buscará tener un buen papel, allá en el Mundial de Clubes.

GIGNAC ILUSIONÓ

América saltó al terreno de juego con la firme idea de asegurar el boleto a Japón y así lo reflejó quedándose con todas las canicas en los primeros minutos del juego.

Tigres intentó adelantar líneas pero Oribe Peralta robó el esférico, entregó a Darwin y la jugada quedó en pie de Samudio, quien no se atrevió a disparar al arco de Nahuel; así se iba la primera oportunidad, acto seguido, Benedetto también tendría la suya.

El arquero felino, Nahuel Guzmán evitó la caída de su marco en los primeros minutos de juego.

Los norteños respondieron rápido, el delantero francés André-Pierre Gignac entregó a Damián Álvarez, quien se quitó dos marcas, pero no a un tercero y el balón se fue para tiro de esquina.

El «Científico del Gol» Darwin Quintero dejó ir el primero, el delantero mandó la pelota al cielo, cuando estaba en mejor posición Benedetto.

Cerca del cuarto de hora, Jiménez tuvo la suya, pero eligió equivocado y sacó centro donde Paúl Aguilar la rechazó con la testa.

Tigres niveló las acciones y fue en busca de acortar en el global.

Sambueza se metió al área y Guzmán rechazó, pero el balón le quedó a Darwin que no pudo poner en riesgo al rival.

Rafael Sóbis cobró un tiro de esquina y Gignac intentó remataer con la testa, pero el balón se fue por arriba del arco contrario.

Aquino intentó hacer lo que mejor sabe, apelar a su rapidez y buena finta, pero en el filo del área le robaron el balón.

El silbante llamó la atención al capitán americanista por constantes faltas sobre el jugador de Tigres, Israel Jiménez, el jugador se molestó y le manoteó al nazareno.

Y después de tantas fallas, por fin Tigres logra acortar distancia en el global. Gignac hizo efectivo un pase de Sóbis y anota el primero del partido.

Ya cerca del final de la primera parte, el balón se encontró en el área de América y no hubo una pierna de jugador de Tigres que la empujara al fondo, perdiéndose así la oportunidad del empate en el global.

Así se fue la primera parte, con el partido abierto para ambas partes.