Intermediarios del sector agrícola ocasionan un encarecimiento de hasta 400 por ciento en los productos, debido a las precarias formas de organización de los agricultores nacionales y su reducido acceso a los canales de comercialización de su cosecha.
Ejemplo de ello es el limón que puede llegar a ser hasta de 86 por ciento, ya que el precio del productor al consumidor se eleva de 1.10 pesos a 8 pesos el kilogramo, poco más de siete veces, y recibe sólo 14 por ciento del precio final.
El margen de intermediación en la cebolla es de 80 por ciento y de 77 por ciento en el jitomate, productos de alto consumo.
Por lo anterior, investigadores y dirigentes de productores urgen la necesidad de buscar esquemas de control para los intermediarios en beneficio tanto de productores como del consumidor.
Fuente: El Financiero/doh/Foto: Archivo