El director del Centro Universitario de Estudios Vulcanológicos de la Universidad de Colima, Raúl Arámbula Mendoza mencionó que contrario a lo que mucha gente piensa, no hay ninguna relación entre la actividad del volcán Popocatépetl con la actividad del volcán de Colima, ya que no existe ninguna conexión entre los colosos.

El investigador resaltó que se puede decir que cada volcán tiene sus propias formas de hacer erupción y el volcán Popocatépetl tiene un periodo eruptivo que inició el 21 de diciembre de 1994 y ha mantenido una actividad regular; mientras que el volcán de Colima ha tenido varios periodos eruptivos, en 1997, 1988, 1999, del 2001 al 2003, luego del 2004 al 2005, después del 2007 al 2011 y el último importante del 2013 al 2017.

“Estamos haciendo el monitoreo del volcán de Colima, el cual se encuentra en niveles bajos de actividad, se hizo un sobrevuelo hace unos días y no se observó nada anormal”, apuntó.

Al señalar que el Volcán de Colima es considerado como el más activo de todo México, debido a los archivos históricos y eruptivos que se tienen, “entonces tenemos que seguir monitoreándolo, para lo cual la Universidad de Colima invierte muchos recursos, tanto humanos como económicos, para mantener un monitoreo para apoyar en la toma de decisiones de las autoridades de Protección Civil, tanto del estado de Jalisco como del estado de Colima, con quien compartimos nuestra información, al igual que con el entro Nacional de Prevención de Desastre”.

Aunado a ello, dijo la población de Colima puede estar tranquila en estos momentos, ya que no hay nada que “nos indique que se pueda reactivar en poco tiempo el volcán, no hay indicios de que se pueda reactivar”, reiteró.

Precisó, además, “el monitoreo volcánico es esencial para disminuir el riego volcánico, con lo cual pueden evitarse muchos desastres, como el ocurrido en el 2018 en el país de Guatemala, en donde murieron más de mil personas”.