La situación empeora porque hay nula vigilancia policíaca, convirtiendo la playa del pueblo como un lugar desolado.

La líder social de la playa San Pedrito, Rosamar Félix Hernández, dijo que incontrolables se han vuelto los indigentes que pernotan en la playa San Pedrito, porque están robando negocios y familias que acuden a disfrutar del lugar, convirtiéndose en una zona de riesgo para la convivencia.

Destacó que la situación empeora porque hay nula vigilancia policíaca, convirtiendo la playa del pueblo como un lugar desolado y los pocos que acuden pronto se retiran, por el temor que sienten al verse acosados por la población que les exige en muchos casos dinero y además su aspecto es temeroso.

Pidió a las autoridades municipales, estatales y hasta federales, su respaldo para reactivar una de las playas que anteriormente fueron un icono para el puerto, pero entre las obras y los indigentes terminaron por ahuyentar al turismo que los visitaba